Tonterías navideñas
Andrés Rodríguez González Enero 13th, 2013
En las Navidades los contrastes se extreman, cualquiera que hubiera pasado por un hipermercado el último día del año podría pensar que la crisis económica había llegado a su fin y que estábamos en el país más desarrollado de la Europa del norte, tal era la acumulación de personas comprando; pero si al salir del establecimiento nos hubiéramos encontrado a unos individuos empeñados en hacer encaramarse a una cabra a lo alto de una pequeña plataforma situada en el peldaño más alto de una escalera, sin duda hubiéramos pensado que del consumo desaforado del primer mundo habíamos pasado a la España rancia de los años cincuenta.
Que el éxito de unas Navidades sea el nº de kilos de caramelos que se arrojan en la cabalgata de Reyes es algo que nunca he entendido, pero ahora, viendo lo que ha pasado en Málaga con un niño muerto por atropello, no solo no lo entiendo, ya ni lo justifico. Es como los adornos navideños que me han parecido siempre un derroche energético. Dicen que animan al consumo, cuando lo que de verdad anima a gastar es que uno tenga un par de billetes de 500 euros en el bolsillo para ese fin: fundirlos en Navidad.