Plantas de la Serranía de Ronda: Amapola y Amapola de Grazalema
Andrés Rodríguez González Junio 29th, 2011
Plantas de la Serranía de Ronda
Amapola. Papaver rhoeas
También llamada vulgarmente Ababol.
Es una planta herbácea con un tamaño máximo de unos 70 cms, pertenece a la Familia de las Papaveraceas. Es inconfundible por las flores de color rojo intenso, pero también son muy característicos los pelos perpendiculares que presenta y que al cortarla suelta un látex blanco lechoso. Es una planta original de Europa, África y Asia.
Posee hojas simples en la base, alargadas y lobuladas. Tiene flores solitarias con pétalos arrugados en botones florales, mostrando al abrirse un color rojo intenso, por lo general presentan una mancha negruzca en la porción basal. Produce flores a finales de primavera y primeros días del verano. Su fruto es una cápsula, llena de semillas. Las amapolas poseen sustancias capaces de teñir por lo que se emplea para dar color al vino, a ciertas medicinas y lanas. Las semillas se han usado para dar sabor a ensaladas de frutas, tartas de manzana, panes y pastas de verduras. Los pétalos de amapolas se pueden emplear como tisanas, mezclada con otras flores. Es una planta con propiedades sedantes y antitusivas, por ello, se ha utilizado para fabricar jarabes contra la tos. También contra el insomnio sobre todo en niños y ancianos. Pero es ligeramente tóxica por lo que se debe administrar con cierto cuidado. En la Serranía se ha usado en otros tiempos para “calmar” a niños revoltosos.
Se cultiva en forma de macizos de flores en taludes, terraplenes y praderas por el color tan intenso y bello que posée. Necesita mucha luz, aguanta a pleno sol aunque el suelo sea seco y pobre. Muy común en bordes de caminos y campos baldíos. Germina muy bien a partir de semillas.
Amapola de Grazalema. Papaver rupifragium
La Amapola de Grazalema es un endemismo que solo se conoce en el Parque Natural Sierra de Grazalema. Pertenece al mismo género que la amapola vulgar y que la Dormidera (Papaver somniferum), que se puede ver cultivada en las llanuras de Antequera.
La Amapola de Grazalema es una planta herbácea más pequeña que la amapola vulgar, de solo 20 a 50 cm., su desarrollo vital dura varios años, aunque la parte aérea se seca y desaparece durante meses, quedan vivos los órganos subterráneos para volver a florecer al año siguiente e intentar colonizar sus alrededores.
El color de sus cuatro pétalos es anaranjado, más claro que el rojo intenso de la amapola.
La podemos admirar de junio a agosto a partir de unos 900 metros de altitud en las sierras del Caíllo, Pinar y Endrinal. También existen bonitos ejemplares cultivados en el Jardín Botánico de El Castillejo. Ocupa una superficie pequeña en el Parque Natural.
Nunca aparece en densidades parecidas a la amapola vulgar de los pastizales. Es una especie muy protegida, una verdadera Joya Botánica, en caso de verla, nunca debemos cogerla. Un endemismo único de la Serranía.