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Próxima ruta de la Serranía Natural: De Ronda el Puerto de los Alamillos (Grazalema) por el Embalse de Montejaque.

Andrés Rodríguez González Febrero 26th, 2012

Próxima ruta de la Serranía Natural:
De Ronda el Puerto de los Alamillos (Grazalema) por el Embalse de Montejaque.

En colaboración con A.R.A.C.A. Asociación Rondeña de Amigos de los Caminos Andaluces.

Día… 04 de marzo 2012. Domingo
Hora… 8h 30 min.
Salida… Ronda. Plaza de la Dehesa. Regreso desde El Puerto de Los Alamillos en autobús de línea (sale del pueblo de Grazalema a las 16h. 15min.)
Distancias…Solo de Ida de 21 Km.
Breve descripción…Vamos por la Dehesa hasta La Indiana, desde allí por Cortijo Grande hasta el Mures, Embalse de Montejaque, Cueva de Hundidero, después tomamos el Camino de Cucadero, el río Campobuche hasta Los Alamillos.

Equipación: Zapatillas de deporte o botas cómodas, bocadillos y agua. Dinero para el autobús de regreso. Al principio de la mañana puede hacer frío.
Interés del recorrido: Unión del río Guadalevín y Guadalcobacín que dan origen al Guadiaro, Boquete del Mures con magníficas vistas sobre la Meseta de Ronda, si vamos bien de tiempo podemos descender hasta la boca de la cueva de Hundidero, la otra entrada de la cueva del Gato, camino de Cucadero, cortijo de Los Calabazares, río Campobuche y sus pequeñas presas, Alcornoque de Las Ánimas que es monumento natural andaluz y Venta de Los Alamillos, donde esperaremos el autobús de línea que nos dejará en Ronda.

Ruta a la Cueva del Gato y vuelta en tren

Andrés Rodríguez González Agosto 18th, 2009

Ruta de Ronda a la Cueva del Gato por la Pasá de Gibraltar

La ruta que propongo es perfecta por su cercanía, la belleza del paisaje, el interés geológico y la presencia de agua.

Tomamos como punto de partida la entrada al Hotel Reina Victoria. El hotel queda a nuestra izquierda y nos dirigimos hacia el Barrio de La Dehesa, pronto encontramos las preciosas vistas de la Hoya del Tajo y las Sierras del poniente de la Serranía destacando en el horizonte las montañas de Grazalema.
Atrás queda una imagen de la Virgen, iniciamos un suave descenso, los pisos de La Dehesa quedan a nuestra derecha, tras pasar frente a unos jardines encontramos una larga fila de casas blancas adosadas, por el primer carril de tierra que encontramos a la izquierda abandonamos la calle, como indicador veremos un poste eléctrico, el carril desciende teniendo a la izquierda el cortado de los Molinos y a la derecha una repoblación de pinos, un camino sale a la izquierda para adentrarse en la Hoya del Tajo a través de los viñedos de Los Terrones, no debemos cogerlo seguimos en descenso teniendo ahora a nuestra izquierda un elevado muro de piedra. Poco más abajo encontramos la puerta de la propiedad del muro que hablamos antes y la trinchera de la carretera de Sevilla, estamos en la entrada de los afamados vinos de Los Descalzos Viejos, continuamos en descenso sin alejarnos del muro, nos acercamos al borde del precipicio ahora ya por un camino estrecho que continua descendiendo entre pinos, plantas aromáticas y las paredes rocosas que limitan la Hoya de Los Molinos hasta que encontramos un amplio carril que sube desde la Hoya. Estamos en el Puerto de La Muela. Hemos recorrido casi dos kilómetros. A nuestra izquierda queda el Puerto de la Muela, los Molinos y el río, continuamos hacia la derecha. Ahora es una antigua escombrera lo que tenemos a nuestra derecha según descendemos, cuando avistemos una nave industrial que es el centro de recepción de residuos sólidos, debemos estar muy atentos pues nuestro camino de desvía por la izquierda del carril principal junto a una viejas casas. Existe un poste indicador. En caso de duda y que siguieramos por el carril principal pronto encontraríamos la carretera de Ronda a la Estación de Benaojan, prueba evidente de que nos hemos confundido. Descendemos de nuevo hasta encontrar un carril que nos hace pasar delante de la Antigua Escuela Rural de La Indiana. Estamos a unos 3,5 Kms del inicio de la ruta.
Continuamos nuestro camino hasta encontrar la carretera junto a una curva, hemos de extremar las precauciones por que el camino continua por el borde de la carretera durante unos seiscientos metros, justo antes del puente, nos desviamos de la carretera a la derecha por un amplio carril junto a unas casas, buscamos el borde del río, pasamos un pequeño puente que supera el río Guadalcobacin que viene de Arriate.
El nacimiento del Guadiaro es la unión del Guadalcobacin con el río Guadalevin (que pasa por el Tajo de Ronda).
También pasamos sobre el arroyo del Cupil que trae las aguas de la estrechura del Hondón y del Puerto de Montejaque.
La Vía del tren, situada apenas 500 metros más adelante marca el inicio del Parque Natural Sierra de Grazalema, actualmente no tenemos que cruzarla para continuar nuestra ruta, por la izquierda, entre la vía y el río han construido un carril recientemente que nos permite seguir un cómodo trayecto llano, jalonado de grandes chopos, algunos invadidos de hiedra. A unos cinco kilómetros del inicio de la ruta, en la otra parte de la vía encontramos un hermoso e histórico Fresno, fue un punto de referencia para pastores y matuteras en sus continuos recorridos por la zona. Cuando el amplio carril casi desaparece convertido en una vereda que busca el río y otra que cruza la vía para iniciar el Camino Viejo de Benaojan, estamos en la Pasá de Gibraltar, un hito importante de la Cañada Real del Campo de Gibraltar. Estamos a 6,5 Kms. del inicio. Hemos de buscar un disimulado puentecillo de madera que nos permite cruzar el río e iniciar la parte final del recorrido, no debemos perder de vista el río a nuestra derecha, si nos alejáramos nos iríamos a la carretera y el camino (aunque con ciertos problemas con la propiedad privada) va por el borde del río. Pasamos detrás de unas casas nuevas (algunas son alojamientos rurales) para llegar frente a la Cueva del Gato, final de nuestro recorrido. Han sido hasta la boca de la cueva 8,5 Kms.

Un puente de hierro revestido de madera que le da aspecto rústico permite superar el río y dejarnos en las mismas puertas de la famosa cueva. No olvidar que estamos en una zona de máxima protección del Parque Natural Sierra de Grazalema. Debemos pedir permiso para acceder al interior de la cueva, por prudencia nunca debemos intentar aventuras en solitario y, en caso de querer atravesar la cueva, lo mejor es contratar los servicios de una empresa autorizada.

La posibilidad de regresar a Ronda en tren es otro atractivo más sobre todo si vamos con niños, si seguimos esta opción, en un par de kilómetros estamos en la Estación de Benaojan. Debemos continuar por una estrecha vereda que discurre por la parte baja del Hotel Cueva del Gato. Dejamos siempre el río a nuestra derecha, estamos en la Vía Pecuaria que comunica la Serranía de Ronda con el Campo de Gibraltar, se pasa por la puerta de un antiguo molino, llamado Cuatro Paradas, rehabilitado para alojamiento rural. Apenas hemos recorrido ni un Km. andando por el mismo borde del río cuando llegamos a la parte baja de un puente, por encima pasa la carretera de Ronda a Benaojan; restos del antiguo empedrado de la vereda nos llevan a la parte baja de un puente. La estrecha vereda se transforma en carril. No debemos dejar de ver el magnífico nacimiento del Molino de El Santo situado muy cerca de la Estación; esta surgencia recoge el agua del Polje de Benaojan y las sierras que hacia él vierten; en periodos de sequía y de verano se presenta menguado de agua pero en otoño, cuando las lluvias son abundantes, la surgencia de agua es verdaderamente espectacular, es otra de las muchas posibilidades que presentan los paisajes de la Serranía, que son diferentes según la época en que los visitemos. Pronto las limpias aguas del nacimiento acaban muriendo en las fangosas del río Guadiaro. De la Estación parte una de las rutas más transitadas del Parque Natural Sierra de Grazalema, es la ruta entre las Estaciones de Benaojan y de Jimera de Libar, que discurre por la orilla del río Guadiaro; otra ruta cómoda pendiente de realizar, lo dejaremos para otro día.

Tomamos el tren en dirección Ronda, por la antigua Estación de La Indiana y el precioso Valle del Guadalcobacín, el tren asciende hasta Arriate, tras la enorme vuelta para superar la diferencia de altura, pronto habremos de bajarnos en la Estación de Ronda, habremos completado así un bonito recorrido.

Macpherson

Andrés Rodríguez González Septiembre 24th, 2008

Personajes y Naturalistas Históricos

José Macpherson y Hemas había nacido en Cádiz, el 15 de Junio de 1839, su padre Donald Macpherson llegó a Cádiz desde Escocia en 1814. En Cádiz se caso con Josefa Hemas Martí, de padre de origen valenciano, tuvieron 11 hijos de los que José hacia el último. A causa de la represión antiliberal la familia Macpherson se instala en Gibraltar en 1.821 o 1.822, allí nacieron siete de sus hermanos. Cuando la situación política mejoro para los liberales, Daniel (Donald) Macpherson regreso a Cádiz y fundó su propio negocio. Su madre murió a las dos semanas posiblemente por problemas del parto, su padre dos años después, el hijo primogénito, de nombre Daniel tuvo que  sacar a delante a sus muchos hermanos. Su hermana Catalina que entonces tenía 17 años actúo como una verdadera madre para nuestro protagonista. Parte de sus estudios, José, los realizó  en Gibraltar donde hubo de desplazarse cuando los movimientos políticos antiliberales le obligaban a ello. José estuvo especialmente relacionado toda la vida con sus hermanos Guillermo, nacido en Gibraltar en 1.824 y que era de tendencias liberales y evolucionistas que siempre tuvo una gran influencia sobre el geólogo y con Catalina, nacida un año antes que Guillermo también en Gibraltar. José no mostró nunca el menor interés por los negocios familiares, tanto es así que cuando su hermana Catalina se casa en Madrid con Diego Fernández Montañés en 1.855 le proporciona trabajo en los negocios de su marido llevándose, unos años después, a José vivir con ellos a Madrid; dos años después abandona el trabajo. José vuelve a Cádiz en plena crisis económica del 1.866. Es en esa época cuando se despierta su vocación geológica, sin duda influido por Domingo de Orueta y Aguirre, también por su hermano Guillermo que era cónsul británico en varias ciudades españolas entre ellas Sevilla, donde debió conocer a Antonio Machado (abuelo de los poetas).  En 1.869 se afilio a la masonería. Entre el año 1.869 y 1.871 viajó a Europa para estudiar diversas ciencias relacionadas con la Geología; la desahogada situación económica de la familia permitió a José hacerse un curriculum a su gusto, pudo, así, completar su formación en el extranjero donde estudio con los mejores especialistas de la época en geología de campo y en la teórica.
Hasta la revolución del año 1.868 no se dieron las condiciones de libertad ideológica y estabilidad política necesarias para el desarrrollo científico en España, el 1.871 se funda la Sociedad Española de Historia Natural (S.E.H.N.) en la que un año después Guillermo y José Macpherson entran a formar parte. Fruto de sus relaciones científicas con Antonio Machado y Núñez fue su primera publicación titulada “Método para determinar minerales” publicado en Sevilla en 1870. Tres años después publica en su ciudad natal el estudio “Bosquejo Geológico de la provincia de Cádiz” con un resumen en inglés que le permite una amplia difusión entre los especialistas extranjeros. Su proyección internacional y el reconocimiento de la comunidad científica fueron de desde ese momento un hecho indudable. Realizó interesantes publicaciones de carácter científico sobre petrográfica, geotécnica y paleogeografía en la Serranía y en otras regiones alejadas de ella que permitieron tener las primeras ideas de síntesis sobre la formación y constitución de la Península Ibérica.


En 1.874 recorrió la Serranía de Ronda acompañado de Domingo de Orueta y Aguirre y su hijo Domingo de Orueta y Duarte, que posteriormente seria alumno de José en la Institución Libre de Enseñanza (ILE).
Cuando en el año 1.875 es deportado Giner a Cádiz, José Macpherson inicia la colaboración con él. Se ejercen nuevas represiones ideológicas en la enseñanza y, como reacción a ellas, se crea la I.L.E.. Ese mismo año, en la S.E.H.N. presenta el trabajo “El origen peridótico de la Serpentia de la Serranía de Ronda” que al año siguiente es traducido al inglés. Sus inquietudes científicas no se limitan al campo de la Geología. Junto a su hermano Guillermo y a Machado fue un activo defensor de las ideas de Darwin y Haeckel, un personaje, este último, mas darwinista que el mismo Darwin y creador del término “ecología” tan de moda actualmente.
Entre 1.877 y 1.881 es la época más fecunda de Macpherson en cuanto a publicaciones y actividad investigadora. En 1.879, en uno de sus múltiples viajes por la geografía española conoce en Galicia a la escritora Emilia Pardo Bazán, con quien mantuvo excelentes relaciones el resto de su vida. Otro de los temas apasionantes para Macpherson fueron los terrenos arcaicos españoles, también destacó en los estudios de la química de los minerales, el matamorfismo y la formación de montañas En 1.879 colabora en al Comisión del Mapa Geológico, concretamente en la elaboración del mapa de la provincia de Sevilla.


En su actividad docente e investigadora, en 1.883, creo una casa laboratorio en la Castellana de Madrid donde se formaron gran cantidad de geólogos.
Otra de las grandes aficiones de José fue la fotografía, tanto la petrográfica como la paisajística. El 25 de diciembre de 1.884 ocurrió el hecho conocido como “El Terremoto de Andalucía” que causo 800 víctimas mortales. Macpherson participó en su estudio y organizó la misión francesa que se desplazo a Andalucía para su análisis.
En 1.901 publica un trabajo titulado “Ensayo de la Historia Evolutiva de la Península Ibérica”.
Sus métodos, enseñanzas y conocimientos le hacen ser considerado como uno de los padres de la moderna geología española. Y todo ello, sin tener nunca un título universitario ni dar clase en la Universidad, pero colaboró en la introducción de las técnicas de laboratorio en España y en el inicio de la petrográfia microscópica con la publicación en 1.870 del trabajo titulado  “Método para determinar minerales”. Además completó la estructura global del paisaje de Giner de los Ríos aportando la visión geológica del mismo y fue maestro de muchos maestros en el campo de la geología española además de contribuir didácticamente a los programas educativos de la Institución Libre de Enseñanza. Junto a Salvador Calderón, Francisco Quiroga y Domingo de Orueta y Duarte es considerado como pieza fundamental en la modernización de la geología española. Nunca fue un geólogo aficionado, era un científico que participó en Congresos Internacionales, publicó sus trabajos en varios idiomas y realizó excursiones científicas con los mejores especialistas en geología.
Un ejemplo claro de ello es un estudio ya clásico en la historia del conocimiento geológico de la Serranía titulado: “Memoria sobre la Estructura de la Serranía de Ronda” publicado en la Imprenta de la Revista Medica, Cádiz 1874; con la metodología descrita, explica la formación del Tajo de Ronda. Sus palabras son un modelo de que el rigor científico puede ser compatible con la fácil comprensión de la lectura por parte de neófitos en las ciencias geológicas; la belleza de la descripción y la comparación que podemos hacer con la realidad actual del Tajo y sus márgenes, nos hacen transcribir textualmente esta parte del estudio: “…Cuando por primera vez lo observé, creí contemplar restos de algún antiguo glaciar; pero lo gastado de los cantos en general, su evidente estratificación y los restos marinos que con frecuencia se encuentran, me hicieron cambiar de parecer y me inclino a creer sea más bien un deposito litoral en el fondo de aquella bahía en donde se acumulaban los detritus que de esa parte de la Serranía acarreaban los antiguos torrentes. Este deposito, gracias a los permeables elementos de que esta compuesto y a la gran cantidad de carbonato de cal que las aguas que descienden de esa sucesión de montañas calizas traen en disolución, se halla tan fuertemente cementado pos esa sustancia, que constituye en general una roca en extremo coherente, y a esta particularidad se debe, en mi juicio la esencial estructura del Tajo de Ronda.  Al salir el río Guadiaro del estrecho y salvaje desfiladero en que lo aprisionan las sierras de Parauta y de la Gialda (en la actualidad Hidalga), entra en los poco resistentes depósitos Numulíticos y Terciarios, por donde se abre un ancho y apacible lecho. De esta manera corre el río unos cuantos kilómetros, hasta que encontrando esa tenaz y resistente formación que recubre los depósitos terciarios, la socava quedando otra vez aprisionado entre las paredes verticales como al cortar la serie de calizas secundarias en la sierra de la Gialda. Así atraviesa la ciudad de Ronda, hasta que cortada toda esa formación, vuelve a penetrar en los deleznables depósitos Terciarios.             Al llegar por segunda vez a estos depósitos, de nuevo los desgasta con facilidad suma, destruyendo al mismo tiempo la parte que constituye la base del conglomerado superior. Socavados gradualmente sus cimientos, se desploma por falta de suspensión la coherente roca en espantosa ruina, dando al Tajo ese sorprendente aspecto que presenta cuando se le ve desde el valle.             Por un medio kilómetro viene el río encallejonado entre las verticales paredes de la angosta brecha que divide a la ciudad de Ronda en dos porciones. Esta brecha que tiene cerca de ochenta metros de profundidad termina de una forma un tanto brusca. De repente se encuentra el conglomerado cortado a pico y en lo mas profundo del valle aparece la formación Terciaria. El río salva esta colosal ruina de mas de cien metros de elevación en una serie de bellísimas cascadas, hasta que penetrando otra vez en los blandos depósitos Terciarios corre apacible por el ameno valle cubierto de árboles frutales que es el principal adorno de la ciudad de Ronda… “.
Como vemos, es mucho más simple que lo que nos han contado tantas veces con terremotos y otras fantasías, se trata de erosión pura y dura del río Guadalevín o Guadiaro, como le llama Macpherson, sobre materiales geológicos de diferente dureza.


Pabellón Macpherson, en la ILE

Las fotos que ilustran el texto han sido cedidas por el Colectivo Cultural Giner de Los Ríos, de Ronda.

Nogal

Andrés Rodríguez González Junio 12th, 2008

Nogal.
Su nombre científico es Juglans regia L. Pertenece a la Familia de las Juglandáceas.
Muy abundantes en otros tiempos en las huertas de los ríos de la comarca siempre que fueran zona abrigadas y de suelos profundos, destacaban los nogales del río Guadalevín, famosos por la calidad de sus nueces. El despoblamiento del campo, el abandono de las formas tradicionales de vida provocó la tala de gran cantidad de estos árboles en los años 1960, en la actualidad son más abundantes en los márgenes del río Guadalcobacin. Son de destacar también los buenos ejemplares existentes en la Estación de Benaojan cerca del río Guadiaro.
El nogal es un árbol de hoja caduca, su tronco es grueso de corteza lisa y gris, a veces algo resquebrajada, copa amplia y redondeada, las hojas, al nacer son tiernas pero pronto se vuelven verdes y duras. Las flores son poco vistosas y existen masculinas y femeninas en el mismo árbol, florece en abril o mayo; el fruto es muy llamativo, recubierto con una piel lisa que acaba secándose y adquiriendo color negro, en su interior se encuentra el hueso dividido en dos partes simétricas, interiormente se encuentra dividido por dos o cuatro falsos tabiques, contiene una sólo semilla hendida en cuatro lóbulos de aspecto cerebroidal. A ese hueso se le conoce como nuez.
Procede del sureste de Europa y se extienden hasta el oeste de Asia. Se cultiva en toda la península hasta los 1.500 metros de altitud. Los romanos lo llamaban “bellota de Jupiter” de ahí deriva el nombre latino.
Su madera es muy cotizada, se ha utilizado tradicionalmente para la fabricación de talla rondeña. Es dura y homogénea, se trabaja bien, admite el pulimento y es de excelente acabado y muy decorativa. Empleada en ebanistería de lujo también para culatas de escopeta y fusiles.


Las hojas las toman los diabéticos, en forma de infusión, para disminuir la cantidad de azúcar en sangre. Las hojas, la corteza y la cascara verde de la nuez se han utilizado como astringentes y para teñir de pardo oscuro. El aceite de nueces se ha utilizado para expulsar la tenia o solitaria de los intestinos.
Actualmente a las nueces se les suponen propiedades cardiacas.

Hiedra

Andrés Rodríguez González Diciembre 11th, 2007

Hiedra.
Hedera helix L.

Pertenece a la misma familia que el Ginsen, pero no podemos pensar que es un grupo pequeño, son 55 género muy abundantes en las zonas tropicales. Son plantas leñosas casi todas, muchas trepadoras y productoras de esencias y resinas. Popularmente se nombra como Yedra.
La hiedra tiene hojas durante todo el año, se fija con firmeza a los objetos en contacto con la planta que pueden ser seres vivos o rocas. En el caso de la fotografía, una hiedra crece aprovechando un chopo en la ribera del Guadiaro cerca de La Pasa de Gibraltar.
Las hojas de esta planta  son duras y lustrosas, más verdes por el haz que por el envés, se disponen alternas sobre las ramas, existen hojas de dos tipos, en las ramas con flor son enteras y las demás en forma de palma. Las flores se reúnen en ramilletes son de color verdoso, el fruto parece un guisante, al principio es verde y después pasa a ser negro.
Se cría en las zonas boscosas y húmedas tanto en ribera como en el pinsapar, también es frecuente ver hiedras tapizando paredes rocosas, como en el Tajo de Ronda y en Manaderos.
Existen dos variedades más importantes aunque en jardinería se han desarrollado otras muchas.
El nombre Hedera ya lo utilizaban los romanos, según algunos autores deriva de la palabra Haedere que significa estar adherido.
Las hojas en uso externo se han utilizado para  acelerar la cicatrización de úlceras, los frutos son tóxicos por lo que es necesario tener mucho cuidado con ellos.
Cuenta Catón que de los troncos se hacían vasos que permitían reconocer el vino aguado ya que al echar el vino, este se filtraba quedando el agua que lo “bautizaba”, el gran botánico Laguna que contaba esta ingenuidad, decía con cierta sorna, que mejor debería ocurrir al revés, que el vaso de hiedra dejara el vino puro y eliminará el agua.


 

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